Son muchos los pueblos que por su belleza merecen ser visitados a lo largo de los casi 100 kilómetros de costa vasca. Y es que en Guipúzcoa no todo es San Sebastián (te recomendamos 10 planes que hacer en San Sebastián), existen pintorescas localidades cuya visita recordarás siempre. Hoy te hablamos de Orio, un espectacular pueblo costero en el que naturaleza y mar se unen. ¡Descubre 4 planes que no te puedes perder en Orio!
Qué visitar en el País Vasco
1.- Casco Histórico
La parte vieja de Orio, Goiko Kale, data del siglo XIII. Parte de la Iglesia de San Nicolás y sube hasta las proximidades de la ermita de San Martín de Tours. Las calles del casco histórico ascienden empinadas escalonadas, casi laberínticas, agarrándose a la roca. Blasones, piedra arenisca bien labrada, balcones de colores vivos, calles empedradas… le dan un sabor medieval. El casco histórico de Orio forma parte de un conjunto urbano de gran valor por conservarse casi intacto el trazado medieval del casco, así como gran número de casas de diversas épocas.
2.- Las playas
Orio es un sitio privilegiado. Está situado en un lugar precioso, donde se juntan el mar, el río y la montaña; y es verde y azul al mismo tiempo, natural cien por cien. La brisa marina mantiene limpias cada una de las esquinas del pueblo, y los montes de alrededor también dan un especial respiro al entorno. Las dos playas de que goza el pueblo son claros ejemplos de esa natural riqueza: Antilla es el nombre de la playa principal de Orio, y Oribazar es otra playa algo más pequeña.
La playa de Orio, Antilla, fue reformada en 1997, y desde entonces, tanto la playa como los alrededores han cambiado notablemente. La tranquilidad es la característica principal que ofrece esta playa. Hasta en los días más saturados de gente (los domingos de agosto), siempre hay sitio en la playa; y no digamos los días de entre semana, en los que puedes gozar de la máxima calma.
3.- Senderismo
El municipio de Orio goza de un atractivo y variado entorno, ideal para el senderismo y las actividades al aire libre. Situado a un paso de la capital Guipuzcoana y enclavado dentro de la comarca de Urola Costa, ofrece una notable riqueza de paisajes que pueden ser explorados por diferentes caminos y rutas. Son muchos los elementos que dan una fuerte personalidad al municipio, desde su historia y tradiciones hasta su geografía y naturaleza.
Para comenzar, y en lo relativo a la orografía, se puede destacar que el monoclinal costero Igeldo-Mendizorrotz-Kukuarri, cordal que desde San Sebastián define el relieve del litoral hasta Orio, alcanza la cota de 364 metros en Kukuarri, y desciende abruptamente hacia el mar dando lugar a una costa salvaje y prácticamente deshabitada, en la que los acantilados son protagonistas. A su vez, cabe destacar que la cadena costera es aquí interrumpida por el amplio cauce de la ría del Oria, que dibuja un tortuoso curso antes de su salida al mar, emplazamiento privilegiado en el que se asienta Orio.
Por otro lado, la margen contraria de la ría se halla definida por una serie de declives que descienden del monte Pagoeta, y que, alternados por pequeños valles, culminan su recorrido en la ría frente a Orio. Este entorno es idóneo para el senderismo, y por ello se proponen a continuación una serie de rutas de senderismo, que se encuentran señalizadas.
4.- Visitas guiadas
En Orio existen diferentes actividades acuáticas. Estas actividades como kayak, remo, raft o sup, son ofrecidas por la empresa Begi Bistan que están en Arraunetxe, en el Centro de Tecnificación del remo. También ofrecen experiencias como «Río angulero», «Remero por un día» o «La historia del remo en Euskadi con visita a sidrería Satxota».
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